La movilidad siempre ha sido un pilar básico de la humanidad. Sin embargo, hoy en día y desde un punto de vista económico, la movilidad en la forma de un sistema de transporte sofisticado no solo es una necesidad imperativa sino que toma importancia económica por mérito propio. 

Cobrar peajes basados en el uso es la forma más eficiente y justa para controlar el tráfico vial, financiar la infraestructura de tránsito y compensar gastos auxiliares como el costo de la contaminación ambiental.

Nuestras soluciones permiten todo lo anterior e incluso más: posibilitan a los conductores pagar los peajes de manera rápida y fácil.

Hemos estado instalando y operando proyectos con éxito en todo el mundo. Cada una de ellos demuestra su rentabilidad y su fiabilidad. Ya sea que se trate de una recaudación de peajes totalmente electrónica en tráfico de flujo libre, o de un pago automático en estaciones de peaje convencionales, para carreteras individuales o regiones completas, en función del tiempo o la distancia, diseñamos, implementamos y operamos la mejor solución para satisfacer las necesidades del
cliente, y nos encargamos adicionalmente de migrar los sistemas existentes.

La gestión del tráfico siempre ha sido vista como un trabajo para los legisladores. Los estatutos y las directivas definen regulaciones que se aplican a varias clases de vehículos, tipos de carreteras y condiciones ambientales. En su esencia, dicha legislación tiene tres objetivos: garantizar la seguridad y protección de todos en la carretera, permitir que el tráfico fluya con la mayor libertad posible y promover el manejo responsable de los recursos ambientales.

Las soluciones técnicas han sido durante mucho tiempo un medio para promover objetivos políticos. En 1868, se instalaron los primeros semáforos en Londres. Hoy en día, los volúmenes de tráfico modernos requieren nuevos enfoques políticos y técnicos. Los métodos aplicados varían de un país a otro, de una ciudad a otra y de una carretera a otra. Nuestras tecnologías se pueden adaptar a cualquiera de ellas.

La movilidad urbana en las ciudades de hoy está evolucionando a un ritmo acelerado. Las ciudades enfrentan grandes desafíos desde varios frentes, como el deterioro de la calidad del aire y el aumento de la congestión. Además, en este período de transición, las ciudades también se enfrentan a la evolución de la movilidad urbana, con nuevos servicios de movilidad, como los vehículos eléctricos y conectados / autónomos. Esto requiere una necesidad urgente de gestión del tráfico urbano y movilidad integrada. Esta gestión integral de la movilidad urbana es posible con el cambio de modalidades y la gestión del tráfico como piezas clave para lograr la reducción requerida de las emisiones relacionadas con el transporte.

Nuestra solución es el corazón de un Centro de Gestión de Movilidad de Smart City, que permite una gestión integral y holística de la movilidad urbana, con el fin de aumentar globalmente la eficiencia y la seguridad y brindar la comodidad y la calidad que esperan los viajeros. Combinamos varias soluciones en una sola plataforma, cubriendo todos los requisitos relevantes para la Movilidad como Servicio personalizado que hace que viajar sea rentable, sin problemas, respetuoso con el medio ambiente y conveniente.

Identificar situaciones de riesgo antes de que representen un peligro, notificar a los automovilistas las zonas de trabajo en las autopistas y la congestión del tráfico antes de atascarse, y utilizar datos precisos para gestionar el tráfico de forma dinámica. Todo esto es posible cuando los usuarios de la autopista pueden recopilar y compartir información entre sí y con los componentes inalámbricos de los sistemas de gestión del tráfico. Los sistemas de cobro de peaje y las soluciones de acceso a ciudades son los primeros pasos en este proceso. Los vehículos se comunican con la infraestructura, suministran datos y reciben información relevante.

El siguiente paso es que todos los vehículos se conecten de forma inalámbrica. Numerosos programas de investigación y proyectos piloto están sentando las bases para un intercambio estructurado de información y procesamiento de datos.