Las autopistas nos facilitan la vida al llevarnos de A a B de forma rápida y eficaz. Sin embargo, las carreteras de alta velocidad también presentan algunos retos.
Al fin y al cabo, la seguridad desempeña un papel especialmente importante cuando se conduce a altas velocidades. Cuanta más información en tiempo real reciban los usuarios de la carretera, más seguros estarán en ella.
Además, esta información puede ayudar a los operadores de la carretera a reaccionar rápidamente ante diferentes situaciones de tráfico.